Ella estaba en su cuarto, tirada en la cama leyendo ese libro que tantas tardes la tiene hipnotizada.
Escuchando esa canción de Pignoise, que tanto la ha hecho pensar... Todo me da igual. Una gran verdad.
De repente, su corazón se paraliza, su mente se queda en blanco y solo se escucha de fondo sus palabras...
-Te amo, siempre, nunca te dejaré, solo tú y nadie más, nunca, toda la vida juntos, por siempre unidos.
Esas palabras llenan su mente como si se tratase de un rompecabezas, el rompecabezas de su vida, de su amor, de él.
Mientras esas palabras recorren toda su mente, ella va recordando todos esos momentos, todos los sentimientos que llevaban en su momento.
Ella lo quiere, no lo ama, ella quiere estar con el, pero no sabe si para siempre, eso es una palabra muy fuerte piensa. Temé decírselo, temé que él sepa la verdad. Piensa en sus palabras, piensa en la manera en la que te lo decía, piensa en que ella no esta preparada para decir, sentir lo mismo, es muy joven todavía para prometer amor eterno, muy joven para decir siempre juntos...
Quien sabe alomejor mañana o pasado ella conoce a otro o él a otra, y se olvidan, se dejan.
Así es la vida, esa es la ley de vida, el enamorarte, dejarte, y volverte a enamorar y así hasta que decides casarte y formar una familia, pero, eso aún queda muy lejos de su vida, eso aún no lo tiene en mente.
Ella aún tiene toda una vida por delante, no sé debe deprimir, ni rayar por eso.
Él lo entenderá, o eso creé ella.
Pero, ¿no crees que siempre es una palabra muy fuerte?
A*
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